Educación contra los delitos de ciberacoso
El pasado lunes 10 de noviembre se celebró en Sevilla, organizada por la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, el V Congreso para el estudio de la Violencia contra las Mujeres. Entre los múltiples actos, simposios, debates y ponencias celebradas en el Congreso, destacó la que, llevando por título “Ciberdelincuencia: internet y redes sociales”, se centró en el análisis de los problemas que, para muchas adolescentes, se están derivando en los últimos tiempos como consecuencia del uso de las redes sociales.
Estíbaliz Linares, especialista en violencia de género y participante en el estudio “Redes sociales y violencia de género” realizado por Sortzen Consultoría, destacó el surgimiento de diferentes formas de violencia en la red. Desde el ciberbullying (el uso de los medios telemáticos para ejercer el acoso psicológico entre iguales) a la sextorsión (chantaje a una persona por medio de una imagen de sí misma desnuda que ha compartido a través de Internet), pasando por el grooming (abuso sexual de menores llevado a cabo por parte de un adulto coaccionando al menor con la información o las imágenes obtenidas por internet) o el sexting (difusión de imágenes u otros contenidos de tipo personal o erótico a través del móvil o de internet), Linares y otros ponentes demostraron cómo la utilización de las redes sociales y de las nuevas tecnologías de la información se utiliza, en muchas más ocasiones de lo que fuera deseable, para “controlar, acosar, desprestigiar, aislar e intimidar” a adolescentes que, en algunos casos, acaban siendo víctimas de algún tipo de ataque sexual.
Para combatir todas estas acciones delictivas y para prevenirlas, Estíbaliz Linares considera fundamental marcar unas pautas claras de seguridad informática. Para ello es necesario, afirmó, realizar una pedagogía educativa desde el feminismo. Es importante que los jóvenes sepan dónde van a parar las fotografías que, de manera más o menos despreocupada, acostumbran a subir a la red o a enviar vía móvil.
Las fotografías más o menos de sexualidad explícita entre los miembros de una pareja pueden, en el momento en el que la relación vive sus mejores momentos, señalar un grado de intimidad apasionada que, en caso de ruptura, puede dejar a los miembros de la antigua pareja a merced de una reacción vengativa provocada por el rencor o el despecho. Es en ese momento cuando las fotografías que muestran a un joven con el pene erecto o a una joven masturbándose y que un día se enviaron junto al mensaje “mira cómo estoy sólo de pensar en ti” o “mira lo que estoy haciendo mientras miro tu foto” se convierten en un instrumento de venganza que pueden circular por ahí sin control, originando todo tipo de problemas.
Educación, educación, educación
El papel imprescindible que debe jugar la pedagogía fue recalcada también por José María Avilés, profesor de Psicología de la Educación de la Universidad de Valladolid. Según Avilés, es de capital importancia acompañar a la joven en la toma de decisiones relacionadas con sus dispositivos móviles porque es muy probable que la joven se sienta afectada por la dependencia, la adicción, la hiperconexión, la fobia a la soledad y la desconexión moral.
Avilés considera determinante el hecho de que la joven no diferencie entre lo público y lo privado. Por eso es imprescindible, señala, enseñarles los riesgos a los que se enfrentan y a autorregular sus actuaciones en las redes sociales. Acompañarles en el diseño de su identidad virtual y a dominar sus propias pautas comunicativas servirán a estas jóvenes para saber enfrentarse a esas situaciones que pueden ocasionarles algún problema que las ponga en una situación difícil.
Fundación Alia2
Las tesis apuntadas por Estíbaliz Linares y por José María Avilés refuerzan la tarea desempeñada por asociaciones como la Fundación Alia2, cuya misión declarada es la de salvaguardar la integridad y el desarrollo emocional e intelectual del menor de edad. Para ello, la Fundación tiene entre sus tareas fundamentales la de informar y sensibilizar al personal docente y especialista que trabaja con la infancia y a los padres y los propios niños para que conozcan a fondo las nuevas tecnologías y sus formas de uso y así evitar que incurran en situaciones que puedan comprometer la integridad de los menores de edad.
Alia2 considera que la información es fundamental. Sólo con información, sostienen, se puede conseguir que los usuarios de las redes sociales sepan cómo detectar, prevenir y afrontar situaciones que puedan poner en riesgo la integridad de los menores de edad. Para conseguir este objetivo es necesario que los niños como los adultos (sus padres) conozcan a fondo el funcionamiento de las nuevas tecnologías. El distanciamiento que en muchos casos puede darse por parte de los mayores en relación a las redes sociales, el acceso a internet o los accesorios portátiles conduce en ocasiones a una situación en la que los menores se sumergen en un universo con leyes más laxas, vigilancia más limitada y contactos más extensos. Para evitar que esto, a la larga, ocasiones problemas, Alia2 realiza charlas en colegios para alumnos, padres y profesores, con seminarios formativos dirigidos a todas las personas implicadas en la formación del menor y con su tarea propagandística. Al hacerlo Alia2 pone su granito de arena a la hora de intentar evitar que los casos de ciberbullying, sexting o grooming se sigan multiplicando.