¿Qué pasaría si construyeras una creencia de que nunca serás rechazado? Acabas de aprender algo acerca de lo que necesitas para llegar a donde quieras ir, divirtiéndote, o descubriendo que la otra persona tiene buen gusto. Aprender a crear tus propios significados y creencias acerca de las cosas, es también una parte poderosa de diseño de tu estado de ánimos.
¿Dónde puedo encontrar una estabilidad con una persona? Hay un montón de cosas que se puede hacer.
Tenía un amigo, era ex legionario, que me comentaba: mira, me da miedo hablar con mujeres. En mi vida me han disparado, he saltado de aviones en paracaídas, he estado en batallas, han explotado bombas cerca de mí… lo único que me da miedo es hablar con mujeres.
Yo le decía que en su mente había creado ese instinto: el tener miedo a las mujeres y que no se lo tomara en broma. Le dije: “pongamos que yo soy una mujer por la que te sientes atraído y que realmente quieres hablar con ella para intentar comenzar una relación: ¿qué le dirías? ¿podrías hablar con ella? Me miró, con ojos de cordero degollado y me dijo, tembloroso: no, no podría acercarme ni a ti.
Entonces, le pregunté: ¿y si hubiera detrás de esa chica un maleante o alguien que le sacará una navaja y estuviera a punto de atracarle? ¿Te acercarías a ella para prevenirle?
Entonces me contestó: ¡pues claro que sí! E iría a protegerla.
Le dije: la cuestión es que cuando no hay peligro físico y está ella sola, te daría miedo entrarle, ¿no? Pero si ves que ella está en algún peligro, ¿no te importaría ir a salvarla y avisarle de ese peligro? ¿Qué sentido tiene esto? A lo que él me contestó: es cierto, no tiene ninguna lógica.
Eso es el miedo a ser rechazado, que te paraliza. Pero, sin embargo, te tienes que enfrentar a algún peligro: no te importa nada y no se te paraliza el cuerpo.
Entonces, hay que cambiarles el sentido a las cosas irracionales. Se puede cambiar el sentido que te hayas creado.
Lo que le quise sugerir es que a no se sabe si se va a tener éxito, pero la cuestión es que no sabes si podrás tener alguna oportunidad si no la buscas. Hay que quitarse el chip del fracaso y cambiarlo por el chip de por intentarlo que no quede, el “no” ya lo tienes: pero si no lo intentas, seguro que no lo sabrás y te quedarás con las ganas de saberlo. Hay que disfrutar del aprendizaje de lo que necesitas para obtener lo que quieres o mejorar lo actual.
Siempre hay que sacar lo positivo de las cosas. Vamos a llegar a esto un poquito más adelante: en cuando hablemos de la confianza de aceptación.
Mucha gente me dice que tienes ansiedad, o terror, cuando se enfrentan a sus miedos y que realmente, prefieren no hacerlo. Si hay una mujer horrible y repugnante, gorda y sin cuidarse, con un bigote en el que se ven migas del último tentempié que ingirió, con unas tetas que le llegan hasta el ombligo… ¿podrías ir a hablar con ella? Realmente la gente dice que no, que no se atreverían a ir. Hasta alguno me comentó: ¿para qué voy a ir? ¿para qué me coma el monstruo de las galletas? Eso sí que es miedo.
Con una mujer bonita, no se podría llamar miedo ni pánico. Hay tanta energía sexual que atraviesa el circuito que un hombre no puede pensar con claridad. Eso es normal. La solución es que hay que trabajar en la forma de pensar para mostrarse a uno mismo que eres capaz de hacerlo y dejar a un lado la energía sexual, cambiar la forma de respirar, cambiar la postura y la forma de hablar. Con algunas personas, encontrar la estabilidad con una chica depende de su forma de pensar.