Los mitos de la bisexualidad
Dentro de las situaciones a las que puede tener que enfrentarse una persona a la hora de ligar es la de darse cuenta de que la persona que le gusta es bisexual. ¿Cómo afrontar esa situación? ¿Se debe renunciar a la conquista? Nuestra respuesta a esta segunda pregunta nunca puede ser sí. Renunciar a poder gozar de la compañía íntima de la persona que nos gusta solo porque esa persona sea y se reconozca como bisexual creemos que es pecar de estrechez de miras y arriesgarse en exceso a perder a quien, posiblemente, podría ser la persona de nuestra vida. Eso sí: que ésa sea nuestra opinión no evita el que reconozcamos que, sin duda, no es sencillo, de buenas a primeras, enfrentarse a una situación que puede descolocarnos. Por eso vamos a dedicar este artículo de Objetivo Ligar a proporcionar una serie de consejos a quien desee ligar con una persona bisexual.
El primer consejo es, siempre, entender que la bisexualidad no es un estado de tránsito hacia la homosexualidad o el lesbianismo. La bisexualidad es, simplemente, una forma de orientación sexual: la que identifica a aquellas personas que, de forma indistinta, puede sentir atracción por personas del mismo sexo o del sexo contrario. La persona bisexual, de hecho, siempre acostumbra a esgrimir un argumento básico, y ese argumento es el siguiente: “yo”, suelen decir las personas bisexuales, “no me siento atraído o atraída por un sexo determinado; me siento atraído/a por una persona en concreto, por un ser humano”. Esto debería servir a la persona que quiera ligar con una persona bisexual como un estimulante de su autoestima, pues esa persona que acepta tus pretensiones no lo hace porque seas hombre o mujer. Lo hace porque está interesado/a en ti por ser como eres como persona.
El segundo consejo para quien quiera ligar con una persona bisexual es que debe asumir el hecho de que su posible pareja sea bisexual como algo absolutamente natural y nunca como una rareza. Del mismo modo que puede ser una persona amable o no, simpática o no, emprendedora o no, la persona que es bisexual posee la bisexualidad como parte de su identidad. Asumir a esa persona debe implicar, pues, asumir su bisexualidad.
Ni promiscuas ni indecisas
Algo habitual entre las personas no bisexuales es considerar que las personas que lo son, son personas especialmente promiscuas. Nuestro tercer consejo si deseas ligar con una persona bisexual es que no asocies ni conviertas en sinónimos los términos bisexualidad y promiscuidad. Hay personas promiscuas y con tendencia a la infidelidad tanto entre las personas hetero como entre las bisexuales o las homosexuales. Finalmente, el que esa persona bisexual que te gusta pueda resultar infiel o no dependerá, única y exclusivamente, de su integridad ética, y no de su orientación sexual.
Otro error que suele cometerse al hablar de las personas bisexuales es el de considerarlas personas indecisas. En cierto modo, lo que se hace al pensar así sobre ellas es no asumir la bisexualidad como algo natural y achacar la misma a una indecisión general de la persona respecto a todas las facetas de su vida. El considerar al bisexual alguien indeciso implica, en cierta medida, el tener de él la imagen de una persona inmadura; algo que resulta erróneo y que puede frustrar anticipadamente y de una manera injusta la posibilidad de ligar con una persona bisexual.
Normalidad y comunicación
Teniendo en cuenta todos los consejos anteriores, quien deseara ligar con una persona bisexual y, finalmente, lo consiguiese, debería iniciar la nueva relación del mismo modo que la iniciaría con una persona heterosexual y debería hacerlo, además, sintiéndose reconfortado o reconfortada por algo de lo que hemos hablado al hablar de nuestro primer consejo: y es que si la persona bisexual ha aceptado estar con nosotros y nos ha escogido como compañeros/as de viaje es, fundamentalmente, porque se siente atraído/a atraída por cómo somos como persona. Y eso, sin duda, debería ser valorado en todo momento como una inyección de autoestima por quien ha conseguido ligar con una persona bisexual.
Ligar con una persona bisexual implica, en muchas ocasiones, el tener que lidiar con los celos. Próximamente trataremos en nuestro blog el tema de los celos y daremos una serie de consejos básicos para manejarse con ellos y para impedir que puedan alterar la percepción que tenemos de nosotros mismos, de nuestra pareja y de nuestra relación. Enemigos acérrimos de las relaciones sanas, los celos pueden multiplicarse por dos en este tipo de relaciones de las que estamos hablando hoy. No en vano, en las relaciones heteros damos por supuesto que nuestra pareja puede sentirse atraída por otras personas de nuestro mismo sexo. Y eso, cuando no sabemos manejar nuestras emociones, puede resultarnos doloroso. En la relación con una persona bisexual podemos pensar con toda tranquilidad, si no estamos educados al respecto y los celos interfieren en nuestra manera de percibirnos y de percibir lo que nos rodea que ese riesgo del que hablábamos se multiplica por dos. Convertir eso en el centro de nuestras preocupaciones puede, como cualquier otro tipo de paranoia, arruinar esa relación.
Finalmente, nuestros últimos consejos a quien desee ligar con una persona bisexual son consejos que deberían servir, también, a cualquier tipo de persona en cualquier tipo de relación y son consejos que tienen que ver, fundamentalmente, con el nivel de comunicación existente entre los miembros de la pareja. Hacer preguntas, aclarar los propios sentimientos, acotarlos perfectamente y escuchar a la pareja es fundamental siempre. Cuando nuestra pareja es bisexual, estos consejos pueden serlo más todavía. En definitiva: no renuncies en ningún momento a preguntar a tu pareja y a aclarar tus dudas cuando desees ligar con una persona bisexual. Hacerlo será la mejor manera de triunfar.