El verano está a la vuelta de la esquina
Conforme avanza el mes de mayo cada vez se hace más cercano ese momento que, no por repetirse año tras año, deja de tener una importancia fundamental para todo aquél que desee conocer chicas y ligar con ellas. Nos referimos a ese instante en que las temperaturas inician su escalada veraniega y los cuerpos reclaman ese chapuzón en la playa y ese tumbarse sobre la toalla, a la orilla del mar, a dejarse acariciar por los rayos del sol.
La playa puede ser un buen lugar para ligar, pero ligar en la playa puede resultar muy difícil si no se siguen una serie de consejos. No en vano, la expresión “ligón de playa” existe, no la hemos inventado hoy, y no siempre juega a favor de todo aquel seductor que desee ligar en la playa. De la misma manera que sucede cuando se intenta ligar en otros lugares, las posibilidades de ligar en la playa dependerán en buena medida del mantenimiento de la actitud adecuada. Ahora bien, ¿cuál es la actitud adecuada para ligar en la playa? En este artículo de Objetivo Ligar intentaremos dar una respuesta a dicha pregunta y te daremos una serie de consejos básicos para que sepas lo que puedes hacer y lo que no para ligar en la playa.
Cuando se habla de ligar en la playa se habla de ligar en un lugar en el que la gente, debido a la poca ropa que se lleva puesta, se siente especialmente expuesta. Esto, claro, puede inhibir a muchas personas. En bikini o bañador, muchas personas pueden sentirse intimidadas. Por otro lado, hay que pensar que muchas personas acuden a la playa para desconectar de todo. Y la persona que quiere desconectarse de todo no quiere, a priori, tener contacto con nadie, lo que no pinta un panorama demasiado halagüeño para todo aquél que desee ligar en la playa.
¿Cómo no ser un chulo de playa?
Pero no estamos aquí para dejarnos vencer por el desaliento. Nuestro objetivo es ligar y la playa es, para nosotros, un lugar tan bueno como cualquier otro para conquistar a una mujer.
Lo primero que hay que tener presente si se quiere ligar en la playa es que a la playa hay que ir bien arreglado. ¿Hasta qué punto? Hasta aquél en que no se pueda pensar que hemos estado acicalándonos durante mucho tiempo. Aunque nuestra intención sea ligar, es importante mostrarse natural. Es más: mostrarse natural es de capital importancia tanto para ligar en la playa como para ligar en cualquier lugar. Lo natural y lo estiloso no están peleados, y conseguir combinar esos dos conceptos recibe un nombre: clase. ¿Un slip entraría dentro de ese concepto? No. Es más, el slip demasiado pequeño figuraría en lo que las mujeres más detestarían y en lo que les serviría como indicativo visual para captar la presencia de lo que se suele denominar un “chulo de playa”. Así lo indica, al menos, el resultado de una encuesta que sobre un corpus de 1.500 mujeres realizó la web de citas Victoria Milan. Según esas mujeres, algunas de las cosas que las mujeres que van a la playa más detestan de quienes ellas identifican como el “ligón de playa” son:
- Los slips demasiado pequeños que dejan poco espacio a la imaginación.
- Que el que intenta ligar haya bebido demasiado.
- Que lance besos al aire y guiñe el ojo.
- Que muestre de manera demasiado obvia su intención de ligar.
- Que trate de emborrachar a la mujer con la que quiere ligar intentando invitarla a cócteles.
- Que se acerque demasiado al hablar.
- Que sea cargante con sus elogios.
- Que utilice a los amigos para comunicarse a través de ellos utilizándolos de intermediarios.
- Que abuse del rol de buen chico.
Sabido ya lo que no debes hacer si quieres ligar en la playa, ¿qué es lo que sí deberías hacer más allá de vestirte adecuadamente para ir a ella?
Consejos para romper el hielo para ligar en la playa
Asumir que exponerse en la playa es como exponerse en un escaparate. Es decir: dependiendo de lo que tengas al lado lucirás con mayor o menor intensidad. O sea: que es muy importante saber dónde colocas la toalla. Si el que está en la toalla de al lado está físicamente peor que tú, tu incipiente barriguita cervecera no parecerá tan antiestética y tendrá, por decirlo de algún modo, su pequeño encanto. Si te colocas al lado de uno de esos hombres que tienen un cuerpo esculpido a base de horas de gimnasio, es difícil que destaques. Al menos positivamente.
Si quieres ligar en la playa deberás, también, valorar si quieres intentarlo con la compañía de amigos o sin ellos. A un chico solo le puede costar más ligar en la playa que a uno que vaya acompañado de sus amigos. El primero puede mostrar demasiado a las claras sus intenciones. El segundo, si se muestra relajado y disfrutando de la compañía de sus amigos, puede resultar más atractivo. Las posibilidades de ligar en la playa aumentan si en ese grupo de amigos que te acompaña hay, también, alguna amiga. Eso sí: si optas por intentar ligar en la playa acudiendo a la misma acompañado de tus amigos, avisa a los mismos de que los puedes dejar “colgados” si intuyes una posibilidad de ligue.
Una buena manera de contactar con una chica con la que desees ligar en la playa es invitarla a jugar a aquel juego con el que estés jugando solo o con tus amigos/as. Puede ser el vóley-playa, puede ser atrapar una pelota, puede ser el lanzarse el disco volador o puede ser, incluso, hacer castillos de arena. El que te vean como alguien que sabe divertirse es una buena propaganda para ti.
Otra manera de intentar ligar en la playa es ofrecer agua a la chica con la que quieras ligar. Para ello, debes haber llevado una nevera con hielo y bebida (a ser posible agua) fresca. Cuando bebas, haz el gesto de ofrecerle bebida sacando un botellín sin estrenar de tu nevera. Si te dice que sí, dale uno de esos botellines y preséntate.
Otro modo de romper el hielo es, si vas solo a la playa y quieres ligar, pedir si, por favor, la chica en cuestión te puede vigilar las cosas mientras vas a darte un chapuzón. Roto el hielo, y si eres un buen conversador, puedes tentar a la suerte manteniendo una conversación relajada y, sin duda, en un ambiente mucho más propicio que la que, por ejemplo, podrías mantener en una discoteca. Podrías iniciar esa conversación, por ejemplo, preguntando si se tomó el día libre en el trabajo, o si ha hecho una pausa en sus estudios o si está ahí de vacaciones. Cualquiera de esas preguntas abre un amplio abanico de posibilidades de conversación. Una vez roto el hielo, sólo hay que seguir las pautas y los consejos que te hemos dado en otros artículos de este blog.