Comunicación con las mujeres.

Con el paso del tiempo, he escuchado todo tipo de excusas para hablar con una mujer: no sé qué decirles, se me congela la mente cuando estoy en frente de una chica, empiezo a hablar y por la cara que ella pone, sé que no lo estoy haciendo bien. “No saber que decir y creo decir lo incorrecto, son las preocupaciones más legítimas. Esto ocurre todos los días, malinterpretaciones, y al final, la chica se acaba yendo pensando “qué raro es éste tipo”. Mayormente, los chicos, carecen de inteligencia social y habilidades específicas de conversación. Con algunas pautas, muy simples, puedes mejorar estas habilidades y, así, aumentar tus habilidades para relacionarte con las chicas. Comencemos …

Encuentro con las mujeres.

La mayoría de vosotros, que están siguiendo mis entradas, tienen dificultad para conocer a nuevas mujeres. Esto puede llegar a resultar muy frustrante y perjudicial para nuestro estilo de vida y autoestima. La mayoría de chicos experimentan una falta de elección a la hora de escoger a su pareja, dejándoles muy insatisfechos. Por norma general, sienten que no son ellos quien las han escogido, sino al revés, son ellas las que le han seleccionado como posibles socios en su vida. La mayoría de chicos que he conocido, no sienten el poder de haber escogido a su pareja. Han carecido de opciones para escoger y han carecido de experiencias reales que conducen a saber lo que quieren. Idealmente, tanto el hombre como la mujer eligen estar en una relación por las razones correctas. Pero, hay gente que dice que es lo primero que encontraron y no había nadie más disponible. ¿Es tu caso? ¿No te gustaría cambiarlo?

Nuestros amigos lectores consisten en tipos interesantes, inteligentes, motivados y, en definitiva, personajes geniales. Sin embargo, ponemos una mujer “10” delante de cualquiera de ellos y, éstos, pierden los sentidos y empiezan a hacer tonterías. Sus rodillas parecen gelatinas y el humo comienza a aflorar por su cabeza. Se hacen un montón de preguntas mientras luchan por el aire que existe a su alrededor, sólo para mantener viva la interacción con ella, mientras que la señorita controla continuamente la situación y busca una escapada rápida y fácil del lugar. Esperemos que hay prestado atención a las técnicas que ya cubrimos en pasadas entradas. Dejamos claro el por qué los chicos se sienten nerviosos y vamos a corregir eso en un futuro.

Personalmente, he fallado muchas veces en mi intento de conocer a las mujeres. Hasta el día que se me ocurrió un plan muy simple, en tres sencillos pasos. Éste plan te da una estructura que te permite demostrar tu personalidad a una mujer de una manera suave y bastante interesante. Eliminar el factor “niño tonto” o “espeluznante” de los pensamientos de la mujer con quien estás hablando, al mismo tiempo que le brindas una amplia oportunidad de relacionarte con ella para que se sienta cómoda a tu lado y en una futura cita con ella. Ésta estructura alivia el nerviosismo y la incomodidad, aumentando las posibilidades de éxito. También reduce el nivel de estrés en tu cerebro que te está gritando continuamente: ¿Qué tengo que decir ahora?

Estos son los tres pasos a seguir:

a.- Enganchar

b.- Gancho

c.- Conectar

Vamos a hablar de uno en uno. Voy a incluir una pequeña conversación que tuve con una mujer, recientemente en una librería del centro de Barcelona. Con ella, pretendo ilustrar cada paso del proceso.

Enganchar.

Parece bastante simple, ¿verdad?

Sólo tienes que comenzar una conversación. Pero, eso sí, recuerda que tienes que hacerlo de una forma correcta. El ambiente en el que te encuentras y jugar en los bordes de las normas sociales (por ejemplo, conversar con un extraño está fuera de las normas sociales). Comienza la conversación con un sarcasmo, o un comentario con buena fe, algo irónico, o sencillamente con algo simple, así:

Yo (en el pasillo de poesía de una librería en el centro de Barcelona): “en el fondo, no sé qué hago aquí: ¡odio la poesía! Pero lo más gracioso de todo, es que vaya por dónde vaya, me encuentro en este pasillo, una y otra vez.

Ella (riéndose): ¡oh! ¿en serio?

Yo: pues sí. Dentro de mí debe haber un duende que me dice: ¡tienes que leer poesía, conquístala! Abre los secretos que hay en un poema y verás que es un mundo apasionante. Y aquí estoy, me gustan los desafíos, ¿sabes?

Éste fue un ejemplo real que tuve hace poco en mi vida, y funcionó. Mi voz, mi cuerpo, mi energía todo esto transmitía a ella que estoy cómodo y relajado conmigo mismo. Esto me ayudó a darme cuenta de que una mujer busca seguridad en un chico seguro de sí mismo, implicado y alguien a quien le gusta charlar. Esa es la única razón por la que empecé a hablar con ella, Por lo que fui el que llevaba la voz dominante, ya que fui a escogerla a ella en lugar de ella me buscara a mí, cosa que dudo.

Por lo tanto, hay que asumir la relación desde un principio. Habla con ella como si fuera una amiga de hace tiempo. Si eres capaz de liderar una situación y por estar cómodo desde un principio, será más seguro que te relajes y puedas abrir una conversación.