Clases de mujeres

Ya lo sabes: realizar cualquier tipo de generalización implica correr el riesgo de caer en la simplicidad. Que cada persona es un mundo es algo que se ha proclamado una y mil veces. Incluso se ha llegado a decir que algunas personas son varios mundos. Que eso sea así no significa que no puedan comprobarse alguna serie de características que, por ser comunes a diversas mujeres, siraen para englobarlas en una especie de grupo que de alguna manera las defina. Una de esas características podría ser la de la voluntad de establecerse con mayor o menor rapidez.

Atendiendo a este criterio, podrías encontrar dos tipos de chicas:

  • La que quiere establecerse cuanto antes, es decir: la que quiere sentar la cabeza.
  • La que sólo piensa en su próxima noche de fiesta y que ni siquiera se ha planteado (o no de un modo serio) la posibilidad de sentar la cabeza.

Al realizar esta clasificación no se pretende, en modo alguno, desprestigiar ninguna de las dos opciones. Ambas son válidas. Al fin y al cabo, ambas responden a necesidades vitales de las personas y a deseos íntimos de cada cual. Y las necesidades vitales de las personas deben ser respetadas. Tan lícito es querer formar una familia como querer disfrutar de la dolce vita fiestera. Son dos opciones vitales que merecen todo nuestro respeto, pero, dependiendo de cómo sea la chica a la que quieras conquistar y de cuál de estas dos opciones vitales haya escogido para ella o la caracterice, así deberás actuar si deseas tener algo con ella.

Conocer cómo es, a este respecto, la chica que queremos conquistar puede servirnos para planificar mejor nuestras acciones seductoras. Ello puede servirnos para evitar una negativa segura y frustrante o puede orientarnos sobre cuál es el mejor momento para ejecutar nuestra intentona seductora.

La chica que quiere sentar la cabeza

Imagina en primer lugar que quieres conquistar a una mujer que está deseando establecerse. En conjunto y a priori, este tipo de chica puede ofrecerte menos diversión que la mujer que piensa única y exclusivamente en la vida loca. Este tipo de chica puede resultar más estricta y exigente. Esa exigencia (que puede traslucirse en un carácter más dominante) se deriva seguramente de una sensación vital que la empuja a rechazar todo juego que no tenga una finalidad que para ella está muy clara y que en ese momento es su principal objetivo en la vida.

El reloj biológico marcas sus horas y este tipo de chicas de las que estamos hablando sienten que el tiempo se agota. Esta sensación no se apodera de la mujer a una edad determinada matemáticamente. Cada mujer tiene la suya propia y el reloj biológico de cada una de ellas funciona de manera diferentes. Para algunas el límite puede estar en la cuarentena de edad. Para otras, el reloj biológico empieza a sonar con insistencia machacona y estridente cuando la barrera de los treinta se acaba de traspasar. A quien, como nosotros, debe ejercer de seductor, no debe importarnos el momento. ¿Qué importa si es a lo treinta o si es a los cuarenta? Lo que importa es que ese tipo de chicas quieren sentar la cabeza y tener un bebé. Quieren ser madres y están buscando a un hombre con el que valga la pena serlo. Si no quieres compartir esa experiencia con esa mujer, si no estás por formar un hogar y tener un hijo, lo mejor que puedes hacer es apartarte de su camino. Es muy probable que, de llegar a algún tipo de relación, ésta no resulte, más allá de la posible intensidad sexual, demasiado placentera. Las expectativas vitales excesivamente divergentes acostumbran a conducir al fracaso y al echarse en cara decepciones e ingratitudes.

La chica de la vida loca

El otro tipo de chica al que hemos hecho referencia al inicio de este post es el de la chica fiestera. ¿Tiene una edad determinada este tipo de chica? No, pero es probable que sea joven. Como joven que es, es bastante pausible que, o no tenga trabajo, o lo tenga pero muy escasamente remunerado. Seguramente, si quedas con una chica de éstas, tendrás que correr con los gastos de las copas. Un consejo que podemos darte es que no te cuelgues demasiado de una chica así. Seguramente ella te transmitirá una feliz sensación de vitalidad y energía. La vida será para ella como una ambrosía que beber sin descanso y tú te emborracharás de esa energía, pero el propio afán fiestero de este tipo de chica la empujará más pronto que tarde a buscar un nuevo compañero de fiestas.

Esto no será así si ese carácter fiestero es sólo una fachada, una especie de cebo, el telón que oculta un fondo diferente de lo que se muestra en él. Esto no es lo habitual pero, tal y como hemos dicho, cada persona es un mundo y bien podría darse este caso.

Otros tipos de chicas

Indudablemente, existen otros muchos tipos de chicas que se sitúan entre estos dos que hemos destacado, oscilantes en algunos casos, más cercanos a uno de los dos en otros. Algunos de esos tipos de chicas serían los siguientes:

  • La chica que busca al hombre perfecto y que mientras tanto va quedando con otros.
  • La chica que busca a un hombre rico para llevar una vida de alto standing o, simplemente, para garantizar el pago de una hipoteca que le haga disfrutar de un rinconcito de su propiedad en el mundo.
  • La mujer divorciada o la madre soltera que no quiere compromisos y que sólo desea salir a cenar y tener una relación sexual ocasional. Esta tipo de chica no quiere una relación. La última que tuvo la dejó completamente agotada, insatisfecha y herida y no desea repetir la experiencia. Esta chica puede ser una divertida y excitante compañera de cama. Eso sí: hay que tener muy claros los límites y las reglas de la relación.
  • La chica que desea encontrar una oreja, es decir, alguien que escuche todos sus problemas y preocupaciones. Es difícil que este tipo de chica quiera mantener relaciones sexuales contigo. Es más: es difícil que esta chica desee tener una verdadera relación contigo. Ni siquiera de follamigo.
  • La chica que acaba de saber que ha sido engañada por su pareja y, en venganza, se lo hace contigo. No esperes de este tipo de chica mucho más allá de esa sesión de sexo vengativo. Lo más probable es que la chica en cuestión vuelva al lado de su pareja a seguir “disfrutando” de su relación de engaños mutuos y reconciliaciones ardientes. Es probable que en esa reconciliación le hable de ti. Reza porque no dé datos demasiado fehacientes y porque su pareja no tenga un concepto demasiado elevado del honor. Si lo tuviera, podrías estar en peligro. La salida de los cuernos escuece y de unos cuernos siempre puede esperarse una dolorosa cornada. Ponte a resguardo de ella tanto como puedas.
  • La chica que quiere dejar su relación actual pero no quiere hacerlo para estar sola. Para evitarlo, sondea el mercado. Este tipo de chica está a la busca. Ella sólo dará el salto de una relación a otra del mismo tipo pero con alguien que la llene más que su actual pareja. Nunca dará el salto al vacío de la soledad o de una relación de menor compromiso que la que ya mantiene.
  • La chica casada. Este tipo de chica sólo busca la aventura de una noche. ¿Leyenda urbana? Ni mucho menos. Esto sucede. Y a diario. Este tipo de chica acostumbra a buscar sexo y sólo sexo. Este tipo de relación es, siempre, peligrosa. Piensa en la reacción de un marido tan celoso como violento. ¿Merece la pena jugarse la integridad física a cambio de un polvo aunque ese polvo sea el polvo del siglo? La respuesta a esa pregunta sólo puedes darla tú.

Reconocer a este tipo de chicas en el proceso de la seducción debe servirte para planificar convenientemente tu actuación. No puedes actuar igual ante todas. Cada tipo de chica exige su propio ritual de seducción y tu propio comportamiento. Acertar con él es fundamental para triunfar en la conquista y, al mismo tiempo, obtener el grado de satisfacción esperado de la misma.