Vamos a deleitarnos en otras horas del día para hacer el amor, no sé como pero tengo ganas de enseñártelo todo, esta noche iremos a un lugar con gente y no llevaré braguitas y cuando llegues a casa, nos desnudaremos el uno al otro, lentamente.

DELEITE A OTRAS HORAS

Muchas parejas están acostumbradas, por razones obvias, a hacer el amor por las noches, a última hora del día. Es una rutina que hay que romper. Vamos a cambiar la hora, vamos a practicar sexo cuando el reloj no marque la hora. Antes de almorzar un sábado o un domingo, antes o después de comer, a la hora de la siesta, antes de ir a trabajar. Hacer el amor cuando haga sol o no haga falta tener las luces encendidas, hace que tu mente se despierte ya que se supone que está haciendo algo fuera de su horario habitual. Si lo haces antes de ir a trabajar, verás que tu tarde será más llevadera.

Hola amor, ¿sabes? Mientras todo el mundo está haciendo otras cosas, nosotros vamos a romper con la rutina de hacer el amor por la noche. Esta noche vamos a dormir desnudos y mañana, pon el despertador media hora antes y despiértame para hacer el amor, antes de prepararte para ir al trabajo. Verás cómo tu día será más soportable y tendrás una sonrisa dibujada en tu rostro toda la tarde. Vamos a cambiar la rutina de hacer el amor por las noches, vamos a disfrutar del sol y que se empape viéndonos retozar durante su estancia en el día.

NO SE CÓMO

Si ya sabes cómo complacer a tu pareja, piensa que no siempre fue así. Al comenzar tu relación con él, ninguno de los dos estaba completamente seguro de las mejores maneras de complacer a su pareja. Esta noche, pretende que no sepa nada de ti, de tu placer ni de lo que te gusta que te hagan. Guíale por el sendero de tu placer, dile que va a ser sumiso y que va a hacer lo que tú le digas para complacerte al cien por cien. Dile que se deje llevar por tus manos y que recorra tu piel a tu gusto. Además de jugar inocentemente, él puede aprender más cosas a cerca de tu placer. Va a ser un juego divertido para los dos y podréis cambiar de roles las veces que queráis. Vais a conseguir con este juego ser mejores amantes.

Tengo un problema amor, me parece que te has olvidado hacerme el amor. Esta noche, voy a enseñártelo todo. Espero que seas buen estudiante y apruebes con muy buena nota. Te voy a explicar todo detalladamente, cómo quiero que me hagas las cosas, como quiero que me toques, donde quiero que tus labios me besen y muchas más cosas que te iré contando por el camino.

ÚLTIMA HORA (nota 1)

Cuando tengáis prisa, no os lo penséis: un polvo rápido desahoga a cualquiera. Disfrutad del momento.

Ven aquí, vamos a desnudarnos rápidamente. Sólo tenemos unos minutos por delante. Vamos a echar un polvo rápido, corre, estoy lista.

ÚLTIMA HORA (nota 2)

Hazle un ofrecimiento, dile que será una sorpresa la próxima vez que vayáis al cine, a cenar, de fiesta o a cualquier lugar dónde haya gente. Dile que te pondrás una faldita o un vestidito. Cuando menos se lo espere, sonríele e iros a un lugar íntimo a echar un polvo rápido.

Cariño, esta noche cuando salgamos, me voy a poner la faldita que te gusta tanto. Sin ropa interior y cuando te sonría, saldremos un momento para un “aquí te pillo, aquí te mato”.

DESNUDARSE PARA EL ÉXITO

Ahora que lleváis un tiempo viviendo en pareja, es probable que no vayáis juntos a la cama o cuando lo hagáis, sea algo rutinario. ¿No sería bonito volver a crear ese nerviosismo que os acompañaba en un principio? Que mejor manera tenéis que desnudar a tu pareja, lentamente, ¿no os parece divertido y excitante? Pon música agradable, enciende velas y espera que tu amor llegue a casa. Cuando entre en la habitación, empieza a desnudarle lentamente y que él, haga lo mismo contigo. Apreciad cada trocito de piel que destapáis.

Querido, no quiero que descuidemos cosas importantes en nuestra relación y la rutina se apodere de nosotros. Por lo que hoy, cuando llegues a casa, te voy a esperar en la habitación, completamente vestida y vamos a desnudarnos el uno al otro, lentamente y saboreando cada parte del cuerpo que destapemos, sin prisas y excitándonos como si no nos conociéramos.